viernes, 27 de febrero de 2015

Emigrantes de Shaun Tan: el libro sin palabras

 

Hoy os voy a hablar sobre un libro que me tiene completamente enamorada, todos los días lo ojeo un ratito y reconozco que cuando lo tengo en mis manos me siento mejor, se trata de uno de los libros del autor Shaun Tan: EMIGRANTES.

Os cuento su historia. Estábamos mi novio y yo en Vitoria pasando unos días con unos amigos, habíamos salido a dar un paseo y vimos una librería con encanto y decidimos entrar. Echando un vistazo a la tienda, más o menos lo de siempre... y en una estantería allí estaba, robando toda mi atención, era imposible mirar hacia otro lado. Un libro diferente, estética antigua, ilustración realista y fantástica a la vez, en tonos sepias, grises... y sin ninguna palabra. Mágico, extraño, precioso.

En ese momento no llevaba dinero suficiente en la cartera y pensé que podría hacerme con él en otro momento. Viajando de regreso a casa no pude dejar de pensar en aquel libro tan peculiar, así que indagué por internet acerca de él, y su sinopsis decía así:

"¿Qué es lo que lleva a tanta gente a dejarlo todo atrás para viajar hacia un país desconocido, un lugar en el que no tienen familia ni amigos, donde nada tiene nombre y el futuro es una incógnita? Esta novela gráfica sin palabras es la historia de cualquier emigrante, refugiado, desplazado, y un homenaje a todos los que han realizado el viaje".

Además, pude leer, entre otras cosas, la explicación del propio autor sobre el motivo por el cual el libro carece de palabras y a que es debido su ambiente de fantasía "social-realista".

No quiero desvelaros tales cosas, investigar este libro y todo lo que fui descubriendo en mi búsqueda hizo que cada segundo que pasaba lo deseara más. En cuanto tuve la ocasión me recorrí Valladolid entero hasta dar con él. Con cada página un mundo nuevo se abría a mis ojos, las imágenes lo decían todo, sus colores hablaban más que mil palabras, y era imposible no sorprenderte con la belleza de la historia y por supuesto, con la calidad de las ilustraciones, técnicamente perfectas.

Sobra decir que es uno de los libros más bonitos que he visto nunca y que merece la pena sino hacerse con uno, echarle una ojeada si se tiene la oportunidad, porque no vais a encontrar nada más mágico y maravilloso.




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